Conoce los medicamentos que te hacen más sensible al sol o el calor
Ciudad de México.- Sobrevivir a los sofocantes meses de verano se ha convertido en todo un reto, y encima estar tomando medicamentos que te hacen más vulnerable al calor, o a la luz solar, podría complicar el caluroso desafío.
¡Sí! Sorprendentemente hay algunos medicamentos que pueden causarnos intolerancia al calor y sensibilidad al sol. Entre ellos están ciertos analgésicos, fármacos para bajar de peso, y medicinas para el trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
«Algunos medicamentos afectan la capacidad del cuerpo para regular la temperatura, lo que aumenta el riesgo de agotamiento por calor e insolación», explica el Dr. Nish Shah, médico de medicina deportiva de atención primaria del Hospital Houston Methodist, «Otros hacen que la piel sea más sensible a la luz solar, lo que se llama fotosensibilidad, y puede conducir a un mayor riesgo no solo de quemaduras solares, sino también de daño a la piel».
Saber cómo afectan tus medicamentos a la sensibilidad al calor y al sol puede ayudarte a disfrutar del verano de manera segura.
Medicamentos que aumentan tú sensibilidad al calor
Durante un día caluroso y húmedo, lo que menos queremos pensar es sobre medicamentos. Aun así, es importante saber si lo que estás tomando te hace más vulnerable al sol. La lista de medicamentos que causan intolerancia incluye un vasto rango, desde aquellos para la presión arterial alta y la pérdida de peso, hasta aquellos contra la ansiedad y la depresión.
Los medicamentos que aumentan la sensibilidad al calor incluyen:
• Diuréticos: aumentan la producción de orina, lo que conduce a la pérdida de líquidos, la disminución de la producción de sudor y potencialmente la deshidratación.
• Anticolinérgicos: bloquean los neurotransmisores que envían señales a las glándulas sudoríparas, lo que reduce la producción de sudor.
• Betabloqueantes: frecuencia cardíaca lenta, lo que limita la capacidad del cuerpo para hacer circular la sangre de manera eficiente para enfriarla.
• Estimulantes: aumentan la tasa metabólica, lo que puede afectar los mecanismos de enfriamiento del cuerpo.
• Antidepresivos: pueden afectar el hipotálamo, que regula la temperatura corporal, y pueden afectar la sudoración.
«Los diuréticos y los betabloqueantes se pueden usar para tratar la presión arterial alta, los anticolinérgicos para ayudar a controlar diversas afecciones como los problemas de vejiga y la enfermedad pulmonar obstructiva (EPOC), y los estimulantes se pueden usar para el TDAH y la pérdida de peso», explica el Dr. Shah. «Los betabloqueantes también se usan para las afecciones cardíacas, como la enfermedad de las arterias coronarias, la arritmia y la insuficiencia cardíaca, y ciertos inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) e inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN) se usan como antidepresivos».
Medicamentos que causan sensibilidad al sol
El sobrecalentamiento no es la única preocupación. Algunos medicamentos también pueden hacer que la piel sea más sensible al sol, lo que aumenta el riesgo de quemaduras solares y daños en la piel que causan cáncer.
La lista de medicamentos asociados a la sensibilidad solar incluye:
• Antibióticos: medicamentos como la doxiciclina, la ciprofloxacina y las sulfonamidas pueden interactuar con la luz ultravioleta para crear compuestos que dañan las células de la piel.
• Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE): el ibuprofeno y el naproxeno pueden causar reacciones fototóxicas cuando la piel se expone a la luz solar.
• Diuréticos (en particular las tiazidas): aumentan el riesgo de fotosensibilidad.
• Retinoides: adelgazan la capa externa de la piel, reduciendo su protección natural contra los rayos UV.
• Antidepresivos: ciertos tricíclicos conducen a una mayor sensibilidad a la luz ultravioleta.
Consulta a tu médico acerca de los efectos secundarios de los medicamentos
Es importante comprender los riesgos de intolerancia al calor asociados con cualquier medicamento o suplemento que estés tomando, pero nunca debes omitir o dejar de tomar lo que está recetado por tu médico, sin consultárselo primero.
«La clave es ser consciente», añade el especialista del Hospital Houston Methodist. «Conoce los posibles efectos secundarios de los medicamentos que estás tomando y no dudes en consultar con tu médico sobre cómo mantenerte seguro en épocas de calor o bajo exposición al sol».
Siempre es importante tener un plan de emergencia relacionado con el calor, especialmente si tienes un mayor riesgo debido a un medicamento que estés tomando.
Consejos para mantenerse seguro en climas calurosos, si tomas uno de los medicamentos antes mencionados
• Mantente hidratado: Bebe mucha agua, especialmente si estás tomando diuréticos.
• Busca sombra o áreas frescas: Permanece en espacios sombreados o con aire acondicionado y evita el ejercicio extenuante al aire libre durante las horas más calurosas del día.
• Use ropa adecuada: Opta por ropa ligera, de colores claros y holgada para estimular la evaporación del sudor.
• Aplica protector solar: Usa protector solar de amplio espectro con un SPF de 30, o más, siempre que estés al aire libre, especialmente si tomas un medicamento sensible al sol.
• Reconoce los síntomas relacionados con el calor: Mantente atento a los síntomas de agotamiento por calor e insolación, como mareos, confusión y sudoración excesiva.
No dudes en buscar atención médica cuando sea necesario.
«La alta temperatura corporal asociada con un golpe de calor puede dañar el cerebro, el corazón, los riñones, los músculos y otros órganos», advierte el Dr. Shah. «Cuanto más tiempo se deje sin tratar el golpe de calor, más daño podría haber en estos órganos vitales, lo que aumenta el riesgo de complicaciones a largo plazo e incluso la muerte».
¿Qué hacer en caso de golpe de calor?
El golpe de calor es una emergencia médica. Si tu o un ser querido muestra signos de insolación, llama al 911 de inmediato. Mientras esperas que llegue la ayuda, trata de calmar a la persona de la siguiente manera:
• Moverlos a la sombra o al aire acondicionado
• Aflojar o quitarse la ropa
• Aplicar compresas de hielo o toallas húmedas en las axilas y la ingle